1 kilo de sardinas medianas.
2 dientes de ajo.
2 hojas de laurel.
1 guindilla.
1 vaso de vino blanco seco.
El zumo de un limón.
1 decilitro de vinagre de sidra.
2 decilitros de aceite de oliva virgen extra.
Sal.
Para la tosta de pan:
4 rebanadas de pan de pueblo.
2 tomates maduros.
4 cucharadas de aceite de oliva.
Una pizca de sal.
Una pizca de azúcar.
Quitamos la cabeza de las sardinas, abrimos el vientre y deslavamos bajo el chorro de agua fría, limpiando la zona de las tripas y las escamas.
Escurrimos para que no les quede agua, salamos el interior de las sardinas y las colocamos en un recipiente para introducir en el frigorífico.
Elaboramos el escabeche mezclando los dientes de ajo fileteados, el zumo de limón, el vino blanco, el vinagre, el aceite de oliva, laurel y un poco de pimentón picante.
Con esta mezcla cubrimos las sardinas, tapamos el recipiente e introducimos en el horno durante 2 horas.
Una vez transcurrido este tiempo sacamos las sardinas del escabeche y las ponemos sobre una bandeja para el horno con parte del escabeche.
Asamos en el horno precalentado a 200º C de 10 a 15 minutos.
Por otra parte calentamos en un cazo el escabeche restante hasta que reduzca ligeramente y ligue la salsa.
Servimos las sardinas sobre unas tostas de pan untado con tomate machacado y ligado con un poco de aceite de oliva, sal y azúcar.
Aliñamos la sardina ligeramente con una cucharada del jugo de escabeche reducido.
Elaboración:
Lavamos los cereales en un colador con agua del grifo, escurrimos y la pasamos a un recipiente hondo; agregamos la tacita de agua o jugo de ...